sábado, 27 de agosto de 2016

Así de cuajo (que no me importa nada y sé que seguramente me volverán) se me han quitado bastante las ganas de escribir en el blog, al menos hasta ahora, como si me careciera de interés. Aparte de que me crea una cierta impotencia por varios motivos que ni permiten explicarse.

Lo habréis leído todos porque lo he visto en uno de estos blogs que tenéis enlazados unos con otros, lo siento que sea así porque encima está recién publicado, pero me ha parecido tan bien visto.. tan exacto.. Sale por lo que me ha parecido ver por internet de una película llamada "Leólo". La primera frase no me identifico porque sí recuerdo y me gusta recordar lo que pasa exactamente, pero sí que seguramente (que es lo que dice) lo otro sea lo que hace que ya sea un libro, una película, o incluso la música que me gusta, me guste tanto, lo necesite tanto (el cine por ejemplo muy claramente) que me da justo ese punto que tan bien explica la frase esta, que me da esas "ganas de vivir" y de manera mucho más directa, inmediata, concentrada y efectiva que la mayor parte de la vida "real":

“No intento recordar las cosas que suceden en los libros. Lo único que le pido a un libro es que me inspire energía y valor, que me diga que hay más vida de la que puedo abarcar, que me recuerde la urgencia de actuar”

Lo he visto aquí:

https://caboleeuwin.wordpress.com/

Cambiando de tema..
Mi situación (laboral etc) está objetiva y en buena parte subjetivamente muy agobiante, tanto que alcanza ese punto que te paraliza hasta físicamente, que no consigues aunque quieras avanzar, mi habitación por ejemplo está empantanada, repleta de bolsas y cajas con cosas para el traslado, a medias todo, no quepo ni yo y es incluso visualmente casi claustofóbico, no me apetece venir a casa solo por como está. Del trabajo no sé nada aún, voy haciendo lo que creo pero aún no me han dicho nada (más que intentar engañarme sin éxito para que me de la baja voluntaria), quiero decir con todo esto que no tengo ni idea de cómo y cuando me van a echar, en realidad (aunque no admito esa opción) si lo voy a conseguir o no, un verdadero rollo todo porque me juego demasiado en ello, y aun así pienso más en otras cosas, mi cabeza y ánimo al menos la mayor parte de tiempo me lo ocupan otras cosas, esa suerte tengo, como si el destino que no existe se hubiera ocupado de que tenga algo con el suficiente nivel (y mas) como para que sea posible que todas estas cosas (los inconvenientes del proceso me refiero) pasen a segundo plano y así no centralicen y desgasten mi cabeza, ánimo y nervios. No es por supuesto que ese su valor, pero coincide que ayuda igualmente.

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