Hoy he soñado que lloraba desconsoladamente, a moco tendido, como lloran lxs niñxs pequeñxs que de tanto llorar se les atropella la respiración. Lloraba contra la cama y decía muchas veces seguidas algo así como "estoy muy sola, muy sola, muy sola...". Al final, aparecía mi madre, bastante fría y que no veo hace unos 8 años, pero por alguna extraña razón aparecía aunque ahí me despertara y no soñara en ningún consuelo. En el sueño estaba tan sola como en la realidad. Me he despertado sorprendida y agotada de la llorera, como si la hubiera llorado de verdad.
Mi soledad verdadera es la de esta viñeta, aun mucho más que la física que es más que obvia pero que me importa menos, de hecho no me importa se podría decir mal y pronto. La física la deseo, no sé estar de otra manera de hecho salvo en alguna rara excepción; la otra me hunde en la tristeza.
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