viernes, 9 de marzo de 2018

Que nerviosa estoy...

No soy capaz de no ponerme nerviosisima cada vez, aunque falten muchas horas aun, noto ansiedad en el corazón, necesidad de coger mucho aire y no soltarlo hasta que me duela físicamente un poco, o darme golpes en el corazón para aliviarlo algo. Una parte de mí sigue temiendo cada vez que la veo esta vez no gustarle, irracionalmente quizás pero es así. También de si estará bien conmigo, si se sentirá muy bien conmigo. Su acercamiento físico lo adoro tanto que también me pone nerviosa horas y horas antes, ese momento (de los mejores del mundo) de pasar de no tenerlo aun a tenerlo ya, de empezar a tenerlo a tenerlo del todo, lo que dura ese maravilloso paso, hasta que me tranquiliza al máximo posible en mí su calor, su suavidad, su delicadeza, su templanza, sus amparadores y refugiantes brazos, sus manos, su pelo, su cara, su forma de ser y tratar, tan generoso todo y tan suyo a la vez.

2 comentarios:

  1. Que maravilloso que alguien te tranquilice y te haga sentir especial. Seguro que para ella ese momento tambien es unico, increible, esperado , deseado, darte y ofrecerte esa parte de ella que sabe que necesitais las dos.
    N

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ojalá tengas razón y para ella también sea todo lo que dices.. ''ofrecerte esa parte de ella que sabe que las dos necesitais'' creo que no puede haber algo mejor que eso estando referido a ella, todo me gusta: que me ofrezca algo, que sea esa parte de ella, que sea a mí, que sea sabiendo, y que sea sabiendo que la necesito y que ella también, lo necesite y sepa que necesita. Cada una de las cosas es una maravilla, por si sola y en el conjunto que dices. Gracias por tu comentario tan bonito N.

      Eliminar